Sólo puede pasarme a mí­ (Primera Parte)

Han pasado varios meses, pero por fin me he decidido a contar la verdadera historia. Después del breve resumen inicial, se amplia la historia con una detallada secuencia de tiempos. Esto es TH1, Behind The Engineering.

– PRIMERA PARTE: La comunidad del tugurio – 

Viernes, 17 de Febrero de 2006
Recibo una oferta de trabajo vía el colegio de ingenieros de la Comunidad Autónoma Desconocida. La oferta la habían enviado el jueves, pero la ví el viernes por la mañana. El trabajo parece que encaja perfectamente con mi CV y con lo que me gustaría hacer además. Ofrecen una pasta, por lo menos para lo que sería mi primer trabajo sin ser becario. Miro la página web de la empresa, bastante currada, muy chula.  Ese día por la noche envío mi candidatura.

Lunes, 20 de Febrero de 2006
El lunes 20 recibo una confirmación de lectura de mi correo a las 11 de la mañana.

Martes, 21 de Febrero de 2006
El martes recibo una llamada de la empresa en cuestión. Mi interlocutor dice que están muy interesados en mí, que mi curriculum se ajusta perfectamente a lo que ellos quieren. Me cuentan muy por encima en qué consistiría mi trabajo… a mí me parece bien. Me comentan que mi parte de mi contrato estaría sujeto a una subvención estatal, tal y cual. Me comenta que les corre prisa cubrir el puesto. Al parecer la oferta llevaba publicada más de 15 días, pero algunos colegios no la recibieron hasta muy tarde. Parece que mi contrato estaría sujeto a la concesión de esa subvención, que si no, en principio, no me contratarían. Humm…. bueno… calma… no empieces pensando mal como haces siempre. Yo digo que sí, que el trabajo me interesa. Me dice que va a hablar con el jefe para tratar de concertar una entrevista y que hoy por la tarde o mañana me llama, que mientras tanto que lo piense y eso, lo que se dice siempre. Mi primera idea fue hacer el viaje de ida y de vuelta en coche a tramo. Es decir, hacer 800 kilómetros, hacer la entrevista en una horita o así y 800 kilómetros de vuelta. Sí, igual era un poco sobrada, sin GPS, sin haber hecho un viaje tan largo en mi vida, etc.  Me da por buscar en google un buscador el nombre de la compañía, y para mi sopresa aparece que había denunciado a la Universidad de 'X', al  rector y al grupo de investigación 'Y' por haberles 'robado' un becario y haber sacado una patente sobre lo que precisamente estaba trabajando ese becario en la empresa.  Hum, vaya qué cosas. Y encima lo publica el propio servicio de noticias de la Universidad de 'X'… bueno… no sé quizás es verdad.

Miércoles, 22 de Febrero de 2006
El miércoles por la mañana recibo la llamada de la misma persona. Me comenta que claro, que quieren conocerme, que quieren hacer una entrevista. También me dice que el plazo para solicitar la beca acaba el lunes siguiente, es decir, en 5 días, y que requiere una documentación extensa. Esto es bastante, bastante más pronto de lo que entendía por "correr prisa". Esto quiere decir que en 5 días debemos pasar enviar el CV a prácticamente firmar el contrato, y todo esto rellenando una extensa documentación para la solicitud de la subvención. Segundo piloto de alarma encendido. Calma… cosas que pasan… Después de esto, le comento que claro, que moverme hasta Castellón a toda leche para hacer una entrevista y llevar un montón de documentación conmigo por si acaso, pues… que vamos… si es que me van a contratar a mí… o soy uno más de los entrevistados (… o qué mecaguenlaputa pasa aquí). Me dice que… vamos que el puesto es para mí… que no van a entrevistar a nadie más y que muy mal tenía que ir todo para que no me cogieran. Lo le dejo caer que bueno, para ir en coche… que el viaje es muy largo… que tenía que ir en autobús… que tal que cual. No sé si es que notó algo o no sé, pero me dice que entiende que para mí que es un desplazamiento largo, y claro, que en un día igual no se soluciona todo, que pin que pan. Me dice que me llama en una hora. Me llama al rato diciendo que le ha comentado la situación al jefe y que este dice que vaya para allá, que me paga el viaje en autobús y la estancia 4 días allí, de viernes a martes, porque hay que rellenar mucha documentación y me pide que vaya ese tiempo, que no va a sobrar nada. Y yo.. joder… xagerao ¿no?… vaya empresa más competente… desde luego se están interesando por mí mucho. Le digo que por mí vale y que nada, que les llamaré cuando llegue al pueblo en cuestión.
Me dedico a buscar el autobús que puede llevarme hasta Valencia y a comprar los billetes. No puedo hacer el viaje con una compañía directamente, tengo que cambiar en Madrid. Los horarios de los dos autobuses encajan bastante mal, y las horas entre el viaje y la espera parecen malos. Así que le comento a mis padres si pueden hablar con la agencia de viajes esa de la que son coleguitas y tal y que si pueden mirar el tema del avión (los billetes por internet estaban acojonantemente caros). En un plis los tíos de la agencia me consiguen billete de ida y vuelta a un precio razonable (teniendo en cuenta el tiempo). A las 5 de la tarde tengo los billetes listos, sólo que en lugar de ser de viernes a martes tiene que ser de jueves a lunes. Llamo inmediatamente a la empresa comentándoles la jugada del avión y de adelantar un día. El tío claro, pone voz de circunstancia, y muy refinadamente me comenta si no he conseguido encontrar un transporte más barato, que si el autobús… y.. bueno viendo que la empresa se gastó muy buen rollo con lo de invitarme y tal pues bueno… me ofrezco a pagar la diferencia entre el viaje en autobús y el avión. Entonces me dice que vale que ningún problema que nos vemos el jueves, que en principio no hay ningún problema para cambiar la reserva del hotel. Me comenta que llame cuando llegue al aeropuerto que si pueden me van a buscar. Todo perfecto hasta el momento.

Jueves, 23 de Febrero de 2006
Cojo un avión después de comer destino Valencia. El vuelo va casi vacío, seremos unas 9 ó 10 personas. Llego a Valencia a eso de las 5 ó las 6 de la tarde. El día anterior había consultado la ruta que tenía que hacer. El pueblo donde estaba la empresa tiene una parada de tren de cercanías, así que del aeropuerto voy a la estación de tren, y de allí pues nada, tren directo hasta el pueblo. Había visto que del aeropuerto a la estación norte Valencia hay un autobús directo. Pues nada, me bajo del avión y llamo a la empresa. Me contesta una mujer y me dice que están en una reunión y que les es imposible venir a buscarme, así que tengo que ir en tren, que eso sí van a buscarme a la estación de tren del pueblo en cuestión. Vale, perfecto, le digo que sin problemas, que ya les llamo cuando llegue. Estoy como un turista pardillo en la planta de abajo del aeropuerto buscando el puñetero autobús que lleva a la estación de tren. Estoy unos minutos afuera sin conseguirlo hasta que decido ir a preguntar a información al piso de arriba. Nada más subir al piso de arriba veo una indicación enorme del autobús. Bien. Genial. Piso de arriba. Complicadísimo. Tú sí que sabes moverte por aeropuertos del mundo… español. Pues nada, del aeropuerto a la estación del norte de Valencia, cojo el tren sin problemas, antes de llegar a la estación les llamo para avisarles de que llego y a eso de las 7, 8 de la tarde me bajo del tren. Espero un rato en la estación hasta que vienen a buscarme.

– FIN DE LA PRIMERA PARTE –

Todo esto es más o menos normal a la hora de buscar un empleo. Ahora bien, a partir de ese momento, todo va a cambiar. Aventura, acción trepidante, locura, redención… unos efectos especiales impresionantes y con el mejor sonido digital. El mejor thriller de los últimos años. No se pierdan el siguiente episodio, próximamente en su The Smoke Sellers más cercano.