Nacho Vigalondo

No se si ya conocen a Nacho Vigalondo, este español que se dió a conocer por la nominación de su corto 7:35 a.m, pero que antes de eso ya llevaba completamente obsesionado con el cine, llevándose premios nacionales con obras como "Snuff Movie" y "Tomar algo por ahí y eso". Y es que no para de trabajar, puede que hasta hayan visto cosas y no sepan que este realizador está detrás de ellas.

Este actor, guionista, director, etc, hasta el momento ha orientado su trabajo a los cortometrajes, con una capacidad de fabricar cine con medios y en lugares donde otros dirían que es imposible.

Entre el extenso material que puedes ver en su web, comentar su corto "Choque", que se pudo ver en varios festivales y cuyo cartel recuerda a "grand theft auto", la bolita, muy recomendable y original. También su curiosa trilogía "Código 7", o como ellos dicen "la revolución definitiva de la ciencia-ficción postindustrial", que es uno de sus primeros trabajos, etc, etc. etc.

Ha colaborado en varios programas de televisión, apareciendo brevemente detrás de la cámara en fenómenos sociales como "La hora chanante", con más de una colaboración como por ejemplo esta parodia de 24, y del videoblog quevidamastriste realizando el episodio del 25 de diciembre.

Actualmente está rodando su primer largometraje titulado "Los cronocrímenes" , en el que para su distribución mantiene contactos con Ridley y Tony Scott  y puede que el proyecto cuente con una dimensión internacional insólita para el primer largo de un español, en el cual su protagonista viaja al pasado para encontrarse 60 minutos antes consigo mismo, y ése es el comienzo de todo un enredo que se irá complicando a medida que pase la película. Por todo esto las expectativas de su público van aumentando cada vez más, pues si eres uno de sus fans, acaba de abrir un diario de producción, el CronoBlog, cuya lectura enganchará más a medida que el rodaje avance, pero que cuenta cosas como por ejemplo que ya circula por ahí una copia del guión del film y puede que no sea su versión final.

Un curioso caso en el panorama de nuestro cine español.