Cuando alguien se propone hacer un blog, al principio salen muchos artículos, muchos temas de los que tratar, todo lo que la perturbada mente del autor ha ido cociendo en un periodo de tiempo, muchas ganas de rellenar una pizarra vacía con cosas que te interesan y que quieres compartir. Pero la vida es dura y eso no dura siempre.
Llega un momento que la procrastinación hace de las suyas y consigue transformar una idea maravillosa para una entrada en el blog, en cuestión de minutos, en una defecación del animal africano mas voluminoso. Y claro, ante esa perspectiva, ni siquiera se empieza a escribir, y esa idea se queda muchas veces en la frase «Hubiera sido un buen artículo«. Sería sorprendente lo que se encontraría si se hiciera una lista con las ideas para artículos que tristemente se quedan en esa frase.
Como ejercicio de buenos propósitos, quisiera reflexionar en voz alta sobre recursos para poner remedio a estas situaciones.
– Recurso de la escritura obligatoria: sentarse 20-30 min. a escribir todos los días pase lo que pase, de forma obligatoria. Es sencillo, si se coge el hábito, no debe costar mucho esfuerzo.
«Es que hoy me han operado de fimosis y estoy convaleciente», eso no es excusa, de hecho mejor, mas tiempo para la reflexión.
– Recurso de Ana Rosa: si después del primer recurso, no hay ningún material aprovechable, siempre se puede invertir un dinero y contratar a un «negro» que vaya escribiendo entradas para el blog. Atención: revisar el trabajo antes de publicar por posible plagio si no se paga bien al susodicho.
– Recurso César Vidal: En estudio.
– Recurso de simetría twittera: convertir el blog en un pseudo-twitter, usando solo 140 caracteres para todas las entradas del blog. No es muy recomendable ya que a la pregunta: » ¿por qué no usas el twitter?» se te puede quedar cara de póker.
– Recurso del uso de drogas: este recurso no es muy aconsejable, ya que así como puede alterar la percepción del sujeto, puede tener efectos secundarios como agresividad, en casos de escasez de sustancias, y a la larga terminar ingresado en una institución.
Hay muchos mas, pero estos son suficientes sobre todo para sentirme culpable cuando vuelva a leer esto en portada del blog y comprobar que no he utilizado ninguno.
Por cierto, no se ha hecho ningún estudio en este blog de estos recursos pero nunca es tarde…
Gracias a Fito, que me ha ayudado a que esto pasara de una idea aislada a un artículillo de poca monta.